La prensa francesa calienta motores desde hace ya algunas semanas. Pero a 48 horas del inicio del considerado como proceso politico-judicial de la década, la tension en la plaza parisina es cada vez màs palpable.
La justicia tratarà, a partir de este lunes, de esclarecer los recovecos mas oscuros de un escàndalo que enturbia desde hace un lustro la derecha francesa y que tiene dos actores principales: el ex primer ministro francès, Dominique de Villepin, y el Presidente de la Republica, Nicolas Sarkozy. Un caso que en Francia es considerado un asunto de estado.
El complejo entramado de este escàndalo podria resumirse en pocas palabras: centenares de nombres incluidos en un listado de cuentas de una entidad financiera luxemburguesa, y que resultan ser falsos. Y en esos nutridos y falsos listados, descubiertos en 2004, personalidades del mundo de la politica, la finanza, la funcion publica, incluso periodistas y artistas. 39 se han personado como partes civiles en el proceso, entre ellas Nicolas Sarkozy. El Presidente de la Republica quiere saber quién le ha incluido en esos listados, por qué, como y cuàndo le han incluido. Todas esas preguntas esperan respuestas en las proximas semanas.
En el banquillo, cinco acusados, el màs notorio Dominique de Villepin, quién fuera ministro de asuntos exteriores y primer ministro durante el mandato de Jacques Chirac. Acusado de "complicidad en una denuncia calumniosa", podria ser condenado a una pena de cinco años de prision.
Villepin es sospechoso de haber participado en la elaboracion de los falsos listados con el fin de desestabilizar la ascension politica y la carrera hacia el Eliseo de Nicolas Sarkozy, su principal adversario politico en aquellos momentos.
Dominique de Villepin ha negado siempre los hechos y ha denunciado la instrumentalizacion politica del proceso. Sus abogados pediràn, segun las ultimas informaciones de prensa, la revocacion de Nicolas Sarkozy como parte civil en el proceso.
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