Astérix cumple 50 años

Quién no conoce las aventuras del más famoso de los galos? Quién no ha leído u hojeado, al menos una vez en la vida, un tebeo de Astérix? En Francia es todo un icono, forma parte del patrimonio cultural del país. Un héroe de tebeo considerado como un monumento nacional.

Astérix cumple 50 años y su regalo es una exposición inédita en el Museo Cluny de París. Por primera vez en Francia, son expuestas una treintena de láminas originales de los tebeos, manuscritos de los autores, objetos personales, como la máquina Keystone Royal utilizada por Goscinny para escribir las 20 primeras historias, y algunas fotografías.

Es un paseo por los orígenes de esta bella historia de galos y romanos, de amistad entre los protagonistas Astérix y Obélix, y entre los creadores René Goscinny et Albert Uderzo.

Sus vidas se cruzan en 1951 y desde ese momento y hasta 1977, fecha del fallecimiento de Goscinny, trabajan codo a codo alimentando las historias protagonizadas por Astérix.

Goscinny es la pluma del guión, Uderzo es el lápiz del dibujo.

Astérix, el Galo ve la luz el 29 de octubre de 1959 en las páginas del semanario Pilote. En un primer momento se trató de una historia de tebeo por entregas para llenar el hueco dejado por otra idea de los creadores que no llegó a tomar forma. Astérix podría no haber visto la luz. Pero afortunadamente para sus lectores, sí lo hizo y fue todo un éxito.

El primer tebeo se publica en 1961. Astérix vive alrededor del año 50 a.c en una aldea al noroeste de la Galia, la única que no ha sido conquistada por los romanos. Es el guerrero más valiente, pequeño y simpaticón, de pelo y bigotes rubios y cuya principal afición es pegarse con los romanos. Junto a él, inseparable, su mejor amigo, el grandullón de fuerza descomunal Obélix, repartidor de menhires, al que le gusta más comer jabalíes que pegarse con los romanos. Esa es la simple receta de un rotundo éxito. 34 tebeos editados, 325 millones de albumes vendidos, traducciones en 107 idiomas, 8 dibujos animados y tres adaptaciones cinematográficas. "Astérix no me pertenece, ha dicho recientemente Uderzo. Es de los lectores. Estoy convencido de que otros talentos continuarán dando vida a los personajes." La insolencia de Astérix, la ingenuidad de Obélix, la fidelidad de Idefix seguirán presentes por mucho tiempo. Eso, al menos, esperan sus seguidores.